La tiroides es una pequeña glándula en forma de mariposa que se encuentra en la base del cuello, justo debajo de la laringe. Aunque a menudo pasa desapercibida, la tiroides juega un papel crucial en el funcionamiento del cuerpo humano. Cuando esta glándula no está funcionando correctamente, pueden surgir diversas afecciones que afectan la salud y el bienestar del individuo.
La glándula tiroides es responsable de producir hormonas tiroideas que son vitales para el metabolismo, el desarrollo cerebral y el funcionamiento de diversos sistemas del cuerpo. Las hormonas tiroideas regulan la energía, el ritmo cardíaco, la temperatura corporal y la síntesis de proteínas.
La glándula tiroides produce principalmente dos hormonas: la tiroxina (T4) y la triyodotironina (T3). Estas hormonas son esenciales para el crecimiento y desarrollo adecuado, especialmente durante la infancia y la adolescencia.
Las afecciones tiroideas son más comunes de lo que se cree, afectando a personas de todas las edades y géneros. Se estima que millones de personas en el mundo padecen algún tipo de afección tiroidea, aunque muchas de ellas pueden no estar conscientes de su condición.
Hipotiroidismo
El hipotiroidismo es una afección en la cual la glándula tiroides no produce suficientes hormonas tiroideas. Esto puede ralentizar el metabolismo y llevar a una serie de síntomas como fatiga, aumento de peso, piel seca y pérdida de cabello.
Hipertiroidismo
En contraste, el hipertiroidismo ocurre cuando la tiroides produce un exceso de hormonas tiroideas. Los síntomas pueden incluir pérdida de peso, nerviosismo, irritabilidad y aumento de la frecuencia cardíaca.
Tiroiditis
La tiroiditis es una inflamación de la glándula tiroides que puede ser causada por diversas razones, incluyendo infecciones virales o autoinmunidad. Puede presentarse con síntomas de hipotiroidismo o hipertiroidismo, dependiendo de la fase de la inflamación.
Nódulos tiroideos
Los nódulos tiroideos son crecimientos anormales en la tiroides que pueden ser benignos o malignos. Su detección y evaluación son importantes para determinar el riesgo de cáncer de tiroides.
Cáncer de tiroides
El cáncer de tiroides es una forma menos común, pero importante, de afección tiroidea. Es fundamental detectar y tratar el cáncer de tiroides a tiempo para mejorar las posibilidades de recuperación.
Síntomas comunes de las afecciones tiroideas
Los síntomas de las afecciones tiroideas pueden variar dependiendo del tipo y la gravedad de la condición. Algunos síntomas comunes incluyen cambios en el peso corporal, cambios de humor, fatiga, problemas de piel y cabello, y alteraciones en la función digestiva.
Proceso de diagnóstico
El diagnóstico de las afecciones tiroideas suele comenzar con una revisión de los síntomas y un examen físico. Los médicos también pueden solicitar pruebas de laboratorio para medir los niveles de hormonas tiroideas en la sangre.
Pruebas de laboratorio y análisis de sangre
Las pruebas de laboratorio, como la medición de los niveles de TSH, T3 y T4, son cruciales para confirmar el diagnóstico de hipotiroidismo o hipertiroidismo.
Uso de ecografías y biopsias para el diagnóstico
En el caso de los nódulos tiroideos y el cáncer de tiroides, se pueden realizar ecografías y biopsias para evaluar la naturaleza de los crecimientos y determinar si son malignos o benignos.
Centro de Endocrinología y Nutrición